DESPERTAR SOCIAL: ELECCIONES EN ANDALUCÍA 2022

A pesar de que haya quienes se empeñen en negarlo, la clave nacional que planea sobre los comicios andaluces es insoslayable.
Editorial – Despertar Social
El pasado martes el Coordinador General de Despertar Social, Pablo Gea, acudió al programa de televisión Vozpópuli, que se emite en la cadena onubense (Lepe) Canalcosta TV, para analizar los escenarios que se abren a raíz de estas Elecciones Autonómicas en Andalucía para el año 2022.

Finalmente, y ante el escenario propicio, el Presidente de la Junta Juan Manuel Moreno propició el adelanto electoral. Frente a quienes preconizaban que agotaría la legislatura al completo, lo cierto es que la ventana de oportunidad era demasiado suculenta como para dejarla pasar. Los debates electorales, si bien poco relevantes a efectos de modificación del comportamiento de los ciudadanos, perfilaron de manera adecuada el mensaje que cada candidato lanza a propios y extraños. Varias cuestiones quedan claras:

- El PP, como ya hiciera en Madrid, opta por una estrategia de hiperproyección del candidato, diluyendo a su vez sus propias siglas. El desastre en Castilla lo aconsejaba. Juan Manuel Moreno implementa una campaña defensiva, en la que se preocupa por mantener lo que hay, barajando los vaticinios que arrojan los sondeos, con la idea de no tener que depender de una fuerza extremista como Vox para gobernar, sabedor de que muchos de sus votantes provienen de la izquierda política desengañada con la gestión socialista.
- Vox necesita alcanzar el Gobierno de la Junta forzando una coalición con el PP. Es lo que su electorado demanda, especialmente teniendo en cuenta que se trata de una formación populista y rupturista a la vez, que necesita mantener el avance electoral permanente para dotarse de coherencia a sí misma y consolidarse en el panorama político para ser determinante en otros escenarios.
- El PSOE, de la mano de Juan Espadas, no ha logrado perfilarse como una opción política con un mensaje coherente. El peso de su desastrosa gestión de la cosa pública durante casi cuatro décadas le arrebata cualquier legitimidad para pedir el voto, salvo el de los estómagos agradecidos o el de los recalcitrantes. La escasa proyección del candidato fuera de la ciudad de Sevilla le pesa mientras no terminan de apagarse los rescoldos de la guerra interna.
- Adelante Andalucía y Por Andalucía, dos formaciones que vuelven a caer en el error recurrente de diluir un mismo proyecto político en un mar de sopas de letras ininteligible. El mismo proyecto que se ha perfilado a nivel nacional para este espectro ideológico, sazonado con elementos de regionalismo andaluz ciertamente trasnochado, que determina un mal resultado en las urnas para un mensaje que no se entiende correctamente.

A pesar de que haya quienes se empeñen en negarlo, la clave nacional que planea sobre los comicios andaluces es insoslayable. Un auténtico referéndum sobre el Gobierno de coalición capitaneado por Pedro Sánchez, que vuelca su desgaste sobre sus marcas autonómicas pero que constituye, a fin de cuentas, una prueba empírica contundente sobre el precio que se paga cuando se gobierna con arbitrariedad.
